The faces - Ooh la la!

Anoche, el concierto que dieron los Diamond Dogs en el Kafe Antzokia ante una escuálida audiencia, me confirmó dos certezas: que hay una clarísima línea dinástica que emparenta a estos con los Faces (salvando océanos de tiempo, que diría el Drácula de Coppola), y que tiene un mérito ciclopeo mantener la formación firme tras 20 años de patear las carreteras. Como muestra los mismos Faces, que necesitaron menos de 4 años para pasar de ser un combo de compadres entregados al bueno rollo, a disolverse como un azucarillo en un chupíto de absenta.

El último de los álbumes de los Faces con su formación completa se publicó en 1973, cuando los puñales volaban en todas direcciones: Rod ya había sacado dos discos en solitario de notable éxito, Ronnie Wood participaba ocasionalmente en conciertos con los Stones y el pérfido Jagger ya barruntaba incorporarle a tiempo completo para mantener entretenido a Richards (by the way, lo de que estos dos aún compartan escenario si que es un milagro), y Ronnie Lane sentía que estos 2 se escabullían, perjudicando la buena marcha del grupo. Súmese a esto rivalidades artísticas, y tiene usted un espirituoso explosívo en la coctelera. 

Sabemos que el disco no es precisamente lo mejor que hicieron, sabemos que no dieron una verdadera gira para promocionarlo, sabemos que la desbandada fué un ejercicio de escapismo digno de Houdini, pero... ¿y esa pedazo de canción?, sí, esa, la últíma, la que da nombre al disco: Mon Dieu!

No añadiré mucho mas; aqui os la dejo via Spotify: The Faces - Ooh la la!. Es, sin duda, lo mejor que ha escrito Lane; Wood le metió cuarto y mitad de guitarra y su voz aguardentosa para redondearla. Y con respecto al bueno de Rod, en fin, sin duda por puros celos nunca quiso cantarla, hasta que en 1998 se cayó del caballo y terminó por grabarla; no le quedó otra reconocer que es un TE-MA-ZO.

A continuación 2 versiones en directo. Primero, Ronnie Lane con su última banda, los Slim Chance, en 1974, poco antes de que le diagnosticaran la enfermedad degenerativa que le dejo listo de papeles.

Y para finalizar, Rod acompañado de las hermanas Corr y haciendo el orangután. 

La letra, magnífica, aquí mismito.